Bueno ya he vuelto de Praga, tras una semanita allí, que me lo he pasado fenomenal, ya que Praga es una ciudad preciosa. Y una semana y una ciudad desconocida da para mucho asi que voy a escribir varias entradas sobre el viaje, siendo esta la primera que va ir centrada sobre la comida, la gente, el hotel en el que estuve, las compras y cuestiones curiosas e interesantes sobre la capital de Bohemia.
Primero hablemos del hotel, me hospedé en el Hotel 987 Prague. Lo mejor de este hotel es su localización emplazado al lado de la estacion de trenes a escasos 10 minutos a pie de la Plaza de San Wenceslao (Novo Mesto) y a otros 10 de la Torre de la Polvora (Entrada a Stare Mesto). Es un hotel de reciente construcción, 2 años tiene al parecer, con un diseño muy modernista en las habitaciones, que están bastante bien salvo el baño que es muy chiquitajo y oscuro (parece un zulo) y solo cuenta con bañera/ducha y el retrete (ya que el lavabo con su espejo está a la entrada de la habitación, "mu original"). La habitación contaba con su aire acondicionado (que siempre lo teniamos puesto a pesar de los agradables 24º de Praga, cosa del "caluroso" de mi padre) y su televisor de pantalla plana con sus ventitantos canales internacionales, donde el único canal de España era la autonómica catalana TV3 (tenía que ver las noticias y enterarme de lo que pasaba en España en catalán, estos catalanes haciendonos el boicot hasta en Chequia, increible). Luego los desayunos eran aceptables, tenían huevos fritos (o en su defecto revueltos) con su bacon y salchichas, y lo mejor cereales muesli buenisimos y zumo de naranaja natural, eso sí no conocen el cola cao y mi pobre hermano tenía que desayunar con chocolate espeso. Como veis por mi, lo mejor del hotel los desayunos, xD.
Imagen del hotel en el que me hospede, el Prague 987.
En cuanto al tema de compras, Praga está llena de tiendas de souvenir, no he visto mas tienda de souvenir en mi vida!! En esas tiendas se puede comprar de todo sobre Praga/Chequia, desde gorras, tazas, camisetas falsas (de equipos de futbol, o la de chequia de hockey con el nombre de Jaromir Jagr a la espalda), Becherovska (licor de hierbas típico) bolas de nieve, platos; hasta llaveros, mecheros, abrecervezas, etc. Una cosa muy chula y curiosa eran las matrioshkas que vendían en un par de tiendas que eran de equipos de fútbol (un montón, de todas las ligas sobre todo la inglesa) de NBA, NHL, MLB, NFL, Rugby y selecciones, una pasada (me pille la matrioshka del Sevilla FC para mi hermano). Y para mi, como siempre me llevé un recuerdo futbolístico y me compre la camiseta del Slavia de Praga. Otra cosa, es que se nota que Praga como capital y gran ciudad no está ajena de la globalización, allí había Zara, C&A, Bata, H&M, Intersport, Telefónica, etc.
Yo con mi camiseta del Slavia Praga
En cuanto al tema de la comida, la verdad que salvo un día que fuimos a comer un español (regentado por sudamericanos, que no sabían ni lo que era una crema catalana) el resto hemos comido platos típicos checos. La foto de la portada es un plato típico checo que comimos hasta en dos ocasiones en el restaurante Kolkovna cerca del barrio judío; es un plato delicioso y completito a base de pan checo, buñuelos de patata, buñuelos rellenos de carne, chucrut (col aliñada), remolacha aliñada, carne de codillo (cerdo), salchicha típica, carne de cordero y muslo de pato en salsa de cerveza, una delicia, riquiiiiiisimo. Luego otra cosa típica de ahi, sobre todo en la Plaza de San Wenceslao que estaba minado, son kioskitos que venden salchichas (pero pedazos de salchichas, grandecitas vaya) con su pan y mostaza, muy ricas, las mejores salchichas que he comido y muy baratas por 1'50€, por tanto una cena consistente y barata. Luego otro plato típico era un pan grande (el único pan bueno que he comido en Chequia, porque el resto estaban pfff, de hecho lo peor de Chequia es su pan) que estaba relleno de un estofado de ternera riquisimo, lo malo que tambien contaba con pedacitos de verdurita, que la comimos sin saber que era, y resulta que era guindilla, no picaba na eso, me sople una pinta del tirón. Luego otro dia en una cena pedi otro plato típico checo pero esta vez no me convencio, era unos filetes de lomo de cerdo (de estos rojitos, nada del otro mundo) con chucrut (lo único bueno del plato) y una especie de tortilla de patatas pero mas rara, que no me gusto la verdad. También probé el pescado checo (de rio obviamente) con un plato la verdad que estaba bastante rico, era un lucio con una salsa de nata muy sabrosa. Luego como ya comenté comimos también en un español, el español aunque el servicio era sudamericano, en la cocina debía haber españoles, aunque la paella dejaba mucho que desear, los boquerones fritos y la crema catalana casera estaban muy ricos, como si estuviesemos en España, además alli fue el único sitio donde pudimos pedir en español y no en ingles. Ya por último hay que hablar de la cerveza ya que Chequia como Alemania, es el país por excelencia de la cerveza y además que si, porque la cerveza Pilsner Urquell (una de las dos cervezas que hay junto con la Gambrinus, que no la probe) es una de las cervezas más ricas del mundo, para mí la mejor incluso superando a nuestra Cruzcampo y con la cerveza hay una gran ventaja alli en Praga, ya que te lo sirven por pintas (medio litro) y por un precio de 33 coronas (unos 1'20 €), un chollo!!
En cuanto a la gente que deámbulaba por las calles de Praga, la mitad eran turistas, de los cuales una gran parte eran españoles (paisanos había a patadas). Pero la verdad que los checos dan un trato amable y abierto a los turistas, eso si, te tienes que comunicar en inglés, porque salvo unos pocos que chapurrean cuatro cosas en español, el resto el único idioma externo que conocen es el inglés.
Y en cuanto curiosidades, pues el 1º dia tuvimos contratada a una guia que era una chica checa que estuvo de Erasmus aqui en Sevilla, que casualidad!! Y como habeis leido, he hablado de coronas (en checo Korun) ya que Chequia, aún siendo de la Unión Europea, mantiene su moneda nacional que equivale a 0'25 centimos de euro.
Sin nada más que contar, me despido hasta la próxima entrada. Natxo
No hay comentarios:
Publicar un comentario