martes, 16 de noviembre de 2010

Cine. Festival. Crítica de los últimos días

Y llegó ya el final del festival y por lo tanto aqui van mis últimas críticas; las del viernes 12 y sábado 13.

El viernes vi dos películas Joy y Black Field y la verdad que bastante regular. La primera es un film holandés en el que la protagonista busca desesperadamente a su madre biológica que la abandonó cuando era ella un bebé y una vez que la encuentra es tal la frustración que no hace nada y se amarga la vida una y otra vez. Tedíosa película que no aporta nada interesante y que te hace odiar la canción de La promesse de Alizee de las veces que la repiten.

Black Field ha sido galardonada (incomprensiblemente para mi) con el Giraldillo de Plata y la verdad que se ve que lo han premiado por otros valores (originalidad del tema, planteamiento, politiqueo o vete tu a saber...) porque los valores cinematográficos me temo que no. La calidad de esta cinta griega deja mucho que desear (sí acaso se salva la fotografía y el sonido) y todo lo bueno que lei/escuche en críticas anteriores no apareció por ningún lado. Esta pelicula está ambientada en la Grecia otomana del siglo XVI y trata la historia de una misteriosa monja que al final resulta ser un hombre (curiosamente, una semanas antes en Historia del Periodismo Universal vi una relación de sucesos del mismo tema) que fue escondido en su infancia para que los turcos no le convirtieran en un jenízaro y una vez que en el convento las monjas retienen a precisamente un jenízaro desertor de las tropas turcas, lo libera y escapa con él para iniciar una especie de romance prohíbido. En definitiva ni guión ni puntos de efecto ni nada. Díficil de digerir.

Y luego el sábado (día de mi cumpleaños :P) vi la cifra nada desdeñable de cuatro películas. Empezamos muy bien con la cinta italiana La prima cosa bella que combina armoniosamente pinceladas cómicas con retazos tristes y emotivos. Se centra en la historia de un hijo avergonzado siempre de su madre, una madre que siempre ha luchado por sus hijos, y que intentan redimirse ahora que su madre está terminal. De lo mejor que puedes ver en el festival.

Después seguimos con la turca Majority (primera producción turca que veo sin que tenga capital alemán y una gran decepción porque esperaba mucho de élla) que trata sobre un mediocre treintañero niño de papá que deja escapar por cobardía al amor de su vida, una chica kurda. Errática manera de plantear la película y flojo hilo argumental. Prescindible.

Luego la cosa mejoró un poquito con la holandesa The happy housewife para volver a empeorarse otro poquito con la alemana Shahada. The happy housewife es otra combinación de momentos amargos y cómicos pero de menor calado donde una joven azafata con una vida perfecta se le tambalea todo al tener su primer hijo padeciendo una tremenda depresión post-parto y termina en un psiquiátrico para superarlo (la parte que transcurre en el psiquiátrico, lo mejor de la película). Luego Shahada refleja la vida de tres musulmanes en la Alemania actual: un policia en la que pesa sobre su cabeza un terrible accidente, un nigeriano repudiando el amor que siente por otro hombre por considerarlo pecado y una joven que tras sufrir un angustioso aborto lo considera castigo de Dios y abraza el fundamentalismo. De esas tres historias la del polícia está un poco como de relleno, pero aún así la película se deja ver.

La verdad que esta vez el nivelito del festival ha bajado un poquito pero aún así ha dejado algunas películas interesantes. He aqui mis tres ganadoras:

1. Third Star
2. Die Fremde
3. L'uomo che verrà

Y por supuesto aqui también están mi lista negra de las tres peores (que son una pérdida de tiempo)

1. La aviadora de Kazbek
2. Four Black Suits
3. Majority

Y nada más, esto es todo lo que ha dado de sí esta edición, así que esperaremos con impaciencia el próximo festival.

Sin nada más que contar, me despido hasta la próxima entrada. Natxo

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